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– Olvídate de las picaduras sin necesidad de químicos.
En verano, el aumento de la temperatura y las lluvias propicia la aparición de mosquitos, y al estar más expuesta nuestra piel, somos más vulnerable a sus picaduras, ¿cómo evitarlas?
Actualmente existen en el mercado una infinidad de productos de todo tipo para ahuyentar a estos insectos y prevenir sus ataques, sin embargo, la mayoría incluyen, mínimo, un ingrediente químico y aunque muchos aseguran no ser tóxicos ni dañar el ambiente, siempre es mejor elegir lo natural y tener la certeza de no contaminar ni ponernos en riesgo.
ALÉJALOS DE TU CASA
Citronela. Lo único que necesitas es conseguir una o varias macetas de citronela y ponerlas en las ventanas, así recibirán el sol necesario y llenarán el ambiente con su aroma cítrico.
Limón + clavo. Parte un limón (o naranja) por la mitad, inserta en cada una clavos de olor y colócalas en diferentes áreas de tu casa; además de barato, dura entre 7 y 15 días.
Lavanda. Aunque para nosotros es agradable su olor, para estos insectos es insoportable, por lo cual colgar ramitos o tener una maceta de esta planta en nuestro hogar, los alejará.
Evita el agua estancada. Las hembras de mosquitos buscan charcos o similares para depositar sus larvas, para impedirlo, no dejes botes ni vasos llenos de agua destapados.
EVITA SUS PICADURAS
Aceites esenciales. Aromas como el eucalipto, la citronela y lavanda los mantendrán lejos. Bastará mezclar unas gotas con nuestra crema humectante y aplicarlo en el cuerpo.
Repelente casero. Sólo es necesario hervir 30 clavos de olor en 1 litro de agua por 30 min, colarlo, combinarlo con shampoo para bebé y distribuirlo en la piel antes de salir.
Colores neutros. Los mosquitos son atraídos por los colores brillantes, lo mejor es utilizar prendas de tonos neutros y claros para evitar llamar su atención.
En caso de tener una picadura, lo mejor es no rascarse, pues esto extiende la saliva del mosquito y provoca que el malestar aumente. La recomendación para aliviar la incómoda comezón es lavar el área y aplicar algún remedio natural como vinagre, sábila o incluso limón, cuidando no exponerse al sol si se elige la última opción.