Siempre se ha dicho que bañarse con agua fría es mucho más beneficioso que con agua caliente, ya que además de despertarnos por la mañana, mejora nuestras defensas y protege la piel.
Sin embargo, un nuevo estudio podría revelarnos que las duchas calientes también son beneficiosas e incluso nos ayudarían a mantener nuestro peso.
De acuerdo con investigadores de la Universidad de Loughborough, Reino Unido, bañarnos con agua caliente puede quemar las mismas calorías que al correr.
¡Sí! Bañarnos por 30 minutos con agua caliente puede hacer que quememos unas 140 calorías y ayudar a prevenir enfermedades como la diabetes tipo 2, ya que regula los niveles de azúcar en la sangre.
Lamentablemente, si piensas emplear la ducha como tu nuevo gym, seguramente se desperdiciará mucha agua. Tómalo en cuenta.
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