Razones por las que no debes ponerle talco a tu hijo

El talco se ha convertido en un producto básico para “cuidar la piel de los bebés”, sin embargo, este producto que parece inofensivo, esconde riesgos mortales para la salud.

Antes de conocer sus riesgos, te explicamos que el talco es un mineral suave de arcilla que se obtiene de depósitos subterráneos.

Está compuesto de magnesio, silicio, hidrógeno y oxígeno; pero también se suele encontrar en los mismo depósitos que el asbesto, sí, una sustancia altamente cancerígena.

Problemas a la salud

Algunos de los problemas de salud que se presentan por el talco son…

Pulmones: Las partículas se alojan en los pulmones y puede causar tos, asma, neumonía y cáncer de pulmón.

Genitales: Pueda causar irritación. En mujeres está relacionado con la  inflamación en trompas de Falopio, esterilidad y riesgo de cáncer de ovario.

Piel: Si se aplica en piel irritada o heridas puede causar la introducción de patógenos dañinos.

¿Dónde se encuentra el talco?

Además del conocido talco para bebé, este mineral lo podemos encontrar en talco para pies, sombra para ojos, bases de maquillaje, rubores y polvos compactos.

¿Cómo sustituirlo?

En el caso de los bebés es necesario eliminar el talco mineral y optar por una alternativa natural como el polvo de cacao y maíz.

Esta mezcla de polvos naturales mantendrá la piel seca y limpia, además de protegerla contra las ronchas.

¡No más talco!